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Fasting in Shawwal

dichos del Profeta

Mensaje del Profeta

  • Relató Abu ia'la, Shadad Ibn Aus (que Allah esté complacido con él) que el Mensajero de Alá (la paz sea con él) dijo: “Ciertamente, Alá ha prescripto la benevolencia en todos los asuntos; entonces si matáis, hacedlo bien y si degolláis, degollad bien. Por lo que afilad vuestros cuchillos y no hagáis sufrir al animal que degolláis”. (Transmitido por Muslim)

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El Profeta Muhammad (e) trataba a la gente y compartía con ellos todas sus vicisitudes: la enfermedad, la salud, la necesidad y la abundancia. El único mérito y privilegio que tenía sobre ellos era el Mensaje que le fue revelado desde el cielo. En este sentido Allâh  dice: {Diles: Yo no soy más que un hombre a quien se le ha revelado que sólo debéis adorar a Allâh, vuestra única divinidad.} [Sura La caverna 110]. El Profeta (e) consolaba a la gente, con poco o con mucho, y los trataba humildemente. ‘Uzmân (t) dijo: “Juro por Allâh que el Profeta (e) nos acompañaba en nuestros viajes y en nuestro lugar de estancia, visitaba a nuestros enfermos, participaba en nuestros cortejos fúnebres, nos acompañaba en nuestras expediciones militares y nos consolaba  en la escasez y en la abundancia…”[1]  ;     ;     ;

De los ejemplos más destacados en relación a la humildad del Profeta Muhammad (e) es su benevolencia con los débiles, los marginados de la sociedad, y a los que nadie hacía caso. Él, sin embargo, les dedicaba una atención especial. Abû Ad-Dardâ’ (t) dijo: Escuché al Profeta (e) diciendo: “Dejad que los necesitados se acerquen a mí; Allah os da victoria y provisión a  causa de vuestros necesitados.”[2]

La humildad del Profeta (e) con los débiles no era simplemente una consolación de palabras, sino que se dedicaba a satisfacer sus necesidades y solucionar sus problemas. ‘Abdul-lâh ibn Abû Aufâ (t) dijo: “El Profeta (e) realizaba mucho Dhikr, no le gustaban las conversaciones vanas, alargaba la oración, reducía el sermón [del viernes] y no se negaba a acompañar a la viuda o al necesitado para satisfacer sus necesidades.”[3]

Lo mismo pasó con las sirvientes. Anas ibn Mâlik (t) narró: “Cualquier sirviente de Medina podía agarrar al Profeta (e) de la mano llevándolo hacia donde quisiera para que la echase una mano.”[4]  

Era también muy humilde con los menores; no se limitaba simplemente a saludarles y a contestar sus saludos, sino que bromeaba con ellos; Anas ibn Mâlik (t) dijo: “El Profeta (e)  bromeaba con nosotros, hasta que una vez bromeó con mi hermano menor diciéndole: “¡Oh ‘Umair! ¿Qué pasó An-Nugair?”[5] (Juego de palabras)

Imágenes de la humildad del Profeta (e):

Hay muchos Hadices que destacan la humildad del Profeta (e) y su exhortación a la misma; en uno de ellos Anas ibn Mâlik (t) dijo: “Mientras estábamos sentados con el Profeta (e) en la mezquita llegó un hombre montado en camello. Hizo que su camello se arrodillara en la mezquita, ató su pata delantera y luego dijo: "¿Quién de ustedes es Muhammad (e)?" En ese momento, el Profeta (e) estaba sentado entre nosotros (sus Compañeros), apoyado en su brazo.”[6] La persona extraña, no podía reconocerle a primera vista, porque no se distinguía por ninguna vestimenta, o comida o bebida [especial], sino que era como cualquier otro hombre entre ellos.

Por otro lado, ‘Abdul-lâh ibn ‘Abbâs (t) narró que el Profeta (e) solía sentarse en el suelo, comer en el suelo, ordeñar las ovejas y responder a la invitación de los sirvientes [para comer] pan de trigo.”[7] Así era la humildad del Profeta (e) en su vida social, ya que no era como los emperadores persas y bizantinos en cuanto a sus adornos y la apariencia en su forma de sentarse y de comer. Y en cuanto a ordeñar las ovejas, es una gran muestra de humildad, pues los que son de alta posición no hacen eso ni tampoco responden a las invitaciones de los pobres sirvientes.

A eso añadimos, también, lo que ‘Abdul-lâh ibn ‘Amr (y) narró: “El Profeta (e) no comía apoyándose en su brazo y no permitía que alguien caminara detrás de él.”[8] Aquí nos enseña que cuando la persona come de lo que da Allâh (I) debe ser humilde y agradecerle a Allâh (I) su gracia. Tampoco el Profeta (e) permitía a la gente caminar detrás de él. Lo hacía por humildad. Y si a los Compañeros (y) les hubiera permitido marchar detrás del Profeta (e), la mayoría de ellos lo habría hecho por respeto y dignificación a su persona.

Anas ibn Mâlik (t) dijo que cuando el Profeta (e) estrechaba la mano de un hombre, él no retiraba su mano hasta que el otro retirase la suya, ni tampoco volvía su rostro lejos de él hasta que el otro lo hacía; y no solía caminar enfrente de sus Compañeros (y)[9]

[Su humildad] en su tratamiento con su familia:

Quizá una persona puede ser humilde con sus compañeros y tratar a su esposa e hijos con dureza. Sin embargo, el Profeta (e) practicaba la humildad en su casa y con su familia; ‘A’ishah (t) nos aclaro qué tareas realizaba en su casa. Al Asuad (t) dijo: “Pregunté a ‘A’ishah (t): ¿Qué es lo que el Profeta (e) hacía en casa? Respondió: “Servía a su familia, y cuando llegaba la hora de la oración se iba a rezar.”[10] Por su parte, ‘A’ishah (t) mencionó más detalles en otro Hadîz: “ayudaba en los quehaceres de la casa: lavaba sus zapatos, cosía su ropa y hacia de todo.”[11]

La humildad en realizar cualquier labor:

En cuanto a la humildad del Profeta (e) realizando cualquier labor, no menospreciaba hacer cualquier labor que su pueblo realizaba. Yâbir ibn ‘Abdul-lâh (t) dijo: “Estuvimos con el Profeta (e) en el pueblo de Dhahrân [Valle cerca de Meca] recogiendo las frutas maduras de un árbol llamado Arak (sus ramitas eran utilizadas para fabricar cepillos de dientes). El Profeta (e) dijo: “Escoged los negros entre ellos.” Preguntamos: “¡Oh Mensajero de Allâh! ¡Nadie diría que has pastoreado ovejas anteriormente!” Contestó: “¡Sí! ¿Acaso existió algún profeta que no haya pastoreado ovejas?”[12]   

No se limitaba a dar instrucciones a sus Compañeros (y), pese a su capacidad para hacerlo, sino que  participaba con ellos. Cuando llegó a Medina, lo primero que hizo fue construir una mezquita con sus Compañeros (y). Y en la batalla del Foso - Gazuah del Jandaq -, cuando Quraish quiso invadir Medina, participaba como uno más en la excavación del foso transportando tierra con sus Compañeros (y) sin fatiga ni desdén. 

Ordenó practicar la humildad mientras que prohibió exagerar en el elogio: 

El Profeta (e) ordenó practicar la humildad y advirtió acerca de la arrogancia. Ayâd ibn Himâr (t) cuenta que el Profeta (e) dijo: “Allâh (I) me ha revelado que debéis ser corteses y  no consideraros a vosotros mismos por encima de otro, ni abusar del prójimo.”[13] También, advirtió de las enfermedades sociales, sobre todo de la arrogancia, diciendo: “No entrará en el Paraíso quien tenga en el corazón el peso de un átomo de arrogancia.” [14]

También, prohibió a sus Compañeros (y) reverenciarle como un rey y levantarse cuando se acercaba, diciendo: “A quien le agrade que la gente se levante por él [en signo de reverencia], tendrá su lugar en el Infierno.”[15] Anas ibn Mâlik (t) dijo: “Nadie era más querido para nosotros que el Profeta (e). [A pesar de eso], cuando le veíamos no nos levantábamos porque sabíamos que odiaba ese gesto.”[16] Y advertía a sus seguidores de cometer el error que cometieron los cristianos, lo cual fue la exageración [acerca de ‘Îsâ (Jesús) (u)], así que Omar (t) dijo: escuché al Profeta (e) diciendo: “No exageren en elogiarme como los cristianos lo hicieron con el hijo de María (u), ya que no soy sino un siervo [de Allâh], así que decid: “el siervo y el Mensajero de Allâh (I).”[17]Cuando uno de los Compañeros (y) le elogiaba, dándole preferencia sobre otros, lo rechazaba. También, Anas ibn Mâlik (t) dijo: “Un hombre vino al Profeta (e) y dijo: “¡Oh el mejor entre la gente!” Así que el Profeta (e) dijo: “Éste [el mejor entre la gente] fue Ibrâhîm [Abraham] (u).”[18]  

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[1] [Ahmad (506)][Al Haizamî, Mayma‘ Az-Zauâ’id (7/155): Sahîh][Al Arnaût: Hasan].

[2] [Abû Dâûd (2594)][At-Tirmidhî (1702)][Al Albânî: Sahîh].

 [3] [An-Nasâ’î (1414)] [Al Arnaût: Sahîh].

 [4] [Al Bujârî (6072)].

 [5] [Al Bujârî (6247)][Muslim (2168)]. 

 [6][At-Tabarânî (12/67)][Al Albânî: Sahîh]. 

 [7][Abû Dâûd(486)][Al Albânî: Sahîh].  

 [8][Abû Dâûd(3770)][Al Albânî: Sahîh].  

 [9][At-Tirmidhî: Hasan Sahîh  (2490)].

 [10][Al Bujârî (676)].

 [11][Ahmad(25662)][Al Albânî: Sahîh].   

 [12][Al Bujârî (3406)][Muslim (2050)].  

 [13][Muslim (2865)].

 [14][Muslim (91)]. 

 [15][Abû Dâûd(5229)] [At-Tirmidhî (2755)][Al Albânî: Sahîh].   

 [16][At-Tirmidhî (2754)][Al Albânî: Sahîh].    

 [17][Al Bujârî (3445)].

 [18][Muslim (2369)].  

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