Con relación a la compasión del Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) con su comunidad, Anas ibn Malik (Allah esté complacido con él) narró: “Mientras estábamos en la mezquita con el Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él), un beduino vino y orinó dentro de ella. Los compañeros exclamaron: “Détente, Detente!” Pero el Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) les dijo: “Déjenlo y no lo interrumpan”. Entonces, lo dejaron hasta cuando terminó. Luego el Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) lo llamó y le dijo: “Las mezquitas no son para orinar ni impurezas, sino para la remembranza de Alá, el Poderoso y Majestuoso, y para la recitación del Corán”. Luego instruyó a uno de sus hombres, quien trajo un balde de agua y lo derramó sobre la orina”. (Al-Bujari y Muslim)
Otro ejemplo fue cuando un hombre joven vino ante el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) y dijo: “Oh Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él), dame permiso para fornicar”. La gente se aproximó, recriminándole, pero Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “Ven, acércate” entonces este se acercó.
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) le dijo: “¿Quisieras eso para tu madre?”
Contestó: “No, por Alá, que Alá me haga tu rescate”.
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “y la gente no quiere eso para sus madres. ¿Lo quisieras para tu hija?”.
Contestó: “No, por Alá, que Alá me haga tu rescate.”
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “y la gente no quiere eso para sus hijas. ¿Lo quisieras para tu hermana?”
Contestó: “No, por Alá, que Alá me haga tu rescate.”
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “y la gente no quiere eso para sus hermanas. ¿Lo quisieras para tu tía paterna?”
Contestó: “No, por Alá, que Alá me haga tu rescate.”
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “y la gente no quiere eso para sus tías paternas. ¿Lo quisieras para tus tías maternas?”
Contestó: “No, por Alá, que Alá me haga tu rescate.”
Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “y la gente no quiere eso para sus tías maternas. Luego puso su mano sobre él y dijo: “Oh Alá, perdona su pecado, purifica su corazón y guarda su castidad.” El joven nunca fue tentado luego de esto. (Ahmad)
En esta gentil manera, el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) fue capaz de influenciar el corazón de ese joven y hacerle ver la ofensa de lo que había pedido. Y esto llevó a su reforma y a que se volviera correcto y casto.
La compasión del Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) por su gente puede verse también en lo que Ibn `Abbas (Allah esté complacido con él) narró: “Mientras el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) estaba dando un discurso un hombre estaba de pie, entonces preguntó sobre él. Ellos le dijeron: ‘Abu Isra’il ha hecho un voto para permanecer de pie y no sentarse, no ponerse a la sombra o hablar y a mantener el ayuno.’ El Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: ‘Díganle que hable, que se ponga a la sombra, que se siente pero que complete su ayuno’.” (Al-Bujari)
También es evidente en lo que `Abdullah ibn `Amr ibn al-`Aas (Allah esté complacido con él) narró: “El Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) fue informado que yo dije: ‘Por Alá, ayunaré todos los días y oraré todas las noches mientras viva.’ Él preguntó: ‘¿Eres tú el que dijo esto?’ Contesté: ‘Yo lo dije, Oh Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él).’ Entonces me dijo: “No serás capaz de hacer eso. En su lugar ayuna y rompe tu ayuno, duerme y ora. Ayuna tres días cada mes, pues una buena acción vale por diez, entonces es como ayunar todo el tiempo.”
En otra narración dijo: “Se me ha dicho que tú ayunas en el día y oras en la noche” `Abdullah dijo: “Si, Oh Mensajero de Alá.” Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “No lo hagas. Ayuna y rompe tu ayuno, duerme y ora, pues tu cuerpo tiene derechos sobre ti, tus ojos tienen derechos sobre ti, tu esposa tiene derechos sobre ti y tus invitados tienen derechos sobre ti. Es suficiente para ti ayunar cada mes tres días, y tendrás por cada buena acción el equivalente de diez; esto es [como] ayunar todo el tiempo.”
`Abdullah añadió: “Cuando lo hice difícil para mí él lo hizo más fácil para mí. Yo le dije: ‘Tengo la fortaleza [para más].’ Entonces, él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: ‘Entonces ayuna como hizo el Profeta de Alá, Dawud, y no más.’ Pregunté: “¿Cuál fue el ayuno de Dawud?’ Él (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: ‘Un día por medio’.” Luego de que envejeció, `Abdullah decía: “Hubiera querido aceptar la concesión del Mensajero de Alá (la paz y las bendiciones de Dios sean con él).” (Al-Bujari y Muslim)